GRACIAS A QUIENES CREEN EN MI, GRACIAS POR DARME OTRO MOTIVO PARA SEGUIR...

Aprende algo
Antes que acabe tu día!!!

No te he de olvidar

El verte es sentir que estas lejos, tu presencia se va, aunque te puedo palpar en mis recuerdos, tu presencia no está, aun así no te he de olvidar.

El silencio se acerca tan sigilosamente que sus pasos retumban en mi alma y el cauteloso olvido me recuerda que no estas conmigo, me atropellan cual furia de un astro estelar y aunque mis heridas no sanarán, el sentir en ellas el rojo color de tu ausencia hace que tu presencia no se extinga jamás.

Detesto aquello que siento cada vez que tu ausencia llega hasta mis ojos y mis manos tocan tu piel en la plena soledad, aun así, no te he de olvidar.

En sueños y vida

Otro sueño que olvido, pasan los días y no caigo en recuerdos, será verdad que vivo y muere el recuerdo en el pasado, o tal vez e soñado algo que no he vivido.

Otro sueño que vivo, pero ¿Por qué no recuerdo? Que habrá pasado, será que abro mis ojos, o en ese momento los estoy cerrando

El tiempo es un ave veloz que atraviesa el mar del destino, forjando en su vuelo fuerza en su alma y olvido en su trino.

El sueño una vida paralela de miles e infinitos caminos, alegres caminares y tristes derrotas, sucesos que al abrir los ojos tal vez hubiese sido mejor dejarlos descansar, se ha olvidado, por mas que quiere recordar.

Tal vez vuelas, o solo amas sin ojos de juicio, tal vez solo ríes en la punta del precipicio o simplemente no existe la pena, el vicio no es un círculo y vives por solo horas, minutos o segundos una vida plena.
Otro sueño que persigo, la vida son solo pocos instantes que plenan un alma vacía, será que el letargo del sueño forma parte de la vida o solo vivimos un sueño en una mínima savia.

La espera

Se impacienta su alma por la larga espera, la soledad a su lado cobija una sonrisa que en silencio le desespera.

A lo lejos extiende su mirada, pero aun no le puede ver, el tiempo pasa lento como contando sus pasos, mientras a su alrededor el mundo camina apresurado, aun no está y necesita su presencia, le quiere a su lado.

No encuentra que pensar, solo se pregunta ¿Por qué aun no llega? En su espera mucha gente ve pasar y en todos lados imagina ver su presencia.

El tiempo en su reloj ve andar y esto le inquieta, mientras sus manos unidas siente sudar, no puede tenerlas quietas.

No sabe si su imaginación aun crea siluetas o en verdad ve su presencia cerca, sus manos seca y es una sonrisa lo que se ve nacer, a muerto la espera pues así tenia que ser.

El tierno saludo que va unido a las miradas se puede ver, y se escapa una pregunta:
-“¿te he hecho mucho esperar?”
–No, para nada, acabo de llegar.

20 Minutos

Me senté a su lado y no pude denotar el tiempo caminar, observaba los demás carros velozmente pasar, y por la acera marchaban muchas personas, algunas en compañía, algunas a sola, si le observaba a mi lado simplemente agonizaban los segundos, los minutos, las horas.

Me senté a su lado y me preguntaba porque camina el tiempo, porque debía morir aquel momento, y sin poderle contemplar no mas de un instante, sólo podía calcar en mis parpados su perfil.

El tiempo apresurado por querer morir, me preguntaba si le faltaba poco para llegar a su destino, me preguntaba si algo le podría decir, me preguntaba si pasaría a ser parte de mi camino.

El sonido de la música, el ruido de los vehículos y el humo que producían, nada, nada de esto existía, toda mi atención estaba sentada a mi lado, y nuevamente le veía, con timidez en mis pupilas que rápido disimulaban, pero sólo ese instante bastaba para alegrar mi día.

¿Alguna otra vez le he de ver? Si. Su imagen siempre estaría, he de recordar el horizonte de su rostro, el ardentía de sus amarillos cabellos, el sol dibujado en sus ojos, y todas las tardes frente al mar le recordaría.

Impredecible como es el futuro me ha dado la noticia que a su destino ha llegado, debo apartarme de su lado para que se pueda bajar, una mirada más le recorre entera, inmutable mi silencio sólo se tira al vacío, estaba soñando estando seguro que no estaba dormido.

Al darme la espalda con una mirada me despido, sigo mi camino recordando 20 minutos que aun no he olvidado y entre estas pocas líneas e plasmado, no quedará en el olvido, me llevo sus cabellos rubios, sus ojos claros y un corazón vacío.