Ausencia

Amo el silencio que invoca tu presencia
y apareces vistiendo de piel en mi cama
luces una sonrisa de perla en tu cara
desfilando recuerdos como lluvia callada.

Duro late mi corazón hambriento
como queriendo salir de mi pecho
quiere volar a tus brazos
y sean tus besos su lecho.

Y así entonces
mientras marchita la rosa, acariciándola el viento
tan pura, tan completa y tan sencilla
como un beso tuyo, restregado en mi pecho.

Recordé

Hoy recordé tu mirar

y sonreí junto a ella

mientras le preguntaba por ti de repente llovían estrellas

y pensaba en ti.

Es calurosa la tarde mientras viajo en un bus

y brillo aun mas el sol derramando gotas de alegría

escuchaba del viento susurrar alguna canción

y te trajeron a mis pensamientos de aquel oscuro rincón.

¿Dónde estarás? le pregunte al tiempo

que caprichoso quiso

alejarnos a los dos.

Alegre corre con la brisa

como el niño que en un parque se divierte

hoy en un bus vacío pude verte

mientras recordé tu sonrisa.

Silencio

Noche sola y fría

en la que hoy me encuentro

mezclo mis palabras y tu silencio.

Lenta noche fría

y en el titilar de las estrellas te consigo

regálame tu voz en almíbar de alegría 

no vayas a dormir, quédate conmigo.

Es luz de luna tu mirar

y en tu cintura dibujo mi destino

húndeme en tus labios cuan profundo mar

no vayas a dormir, quédate conmigo.

Y si hoy sabes de mi, de seguro te dijo el viento

que cobijo tus sueños en mis suspiros

y así como en tus manos detienes el tiempo

no me apartes de ti en tu camino.

Hoy en la distancia te grito

un susurro de palabras casi humanas

y en el silencio profundo de esta noche callada

no te vayas a dormir, sin mi abrigo.

Y así como un beso

el mas pequeño de todos

enciende una llama

que acaba con todo.

¿o es que acaso no sueñas en tu cama conmigo?

y así como tus sueños son la realidad que persigo

ha de ser tu mano la guía en mi camino

y así entonces como la arena y el mar, serán tu amor y el mío

las sabanas que me cubran, en ésta noche de frío.

Noche quimera.

Vuelve a sonreír noche callada

ya no eres la misma que antes contemplaba

no veo en tu ser las estrellas,

aquellas que confundí con hermosas hadas.

Vuelve a ser feliz noche calmada

vuelve como antes a mi ventana

lleva a tu infinito los sueños que dejo en la almohada

y déjame deseos que vivir en la mañana.

Vuelve a suspirar noche sensata

palabras que alejen un poco el frío

has danzar la luna desde la montaña

que se reflejen en el mar sus ondas de plata.

Vuelve a cantar con tu silencio

hasta dejarme lentamente dormido

vuelve a ser la que antes eras

no me tires al olvido.

Vuelve a ser feliz noche quimera

que mis palabras casi ajenas

se entristecen si no estas

en mis noches, en mis poemas.

Vuelve noche mensajera

a ser quien mis palabras

arrastraba en el viento

hasta aquella ventana.

El verso.

Canta el viento sin saber que canta
y pasa el tiempo, sin saber porque
a veces la vida es sólo un recuerdo
a veces muere el verso, y no lo sé.

Así como nace el día
así como poco a poco se va el ayer
así, como la brisa vespertina
así huye el verso, también.

El verso llega como la lluvia
a veces como un rocío
y como tormenta también
y si llena un corazón vacío
entonces nunca deja de llover.

El verso da calor y frío
alegrías y llanto, lo sé
y así como nace un río
así nace el verso, también.

A veces.

A veces y sólo por un instante
siento parar el reloj
aunque acompañado, sin nada
ni la brisa me acompaña
ni sale la luna, ni se apaga el sol
a veces y sólo por un instante
sin silencio y sin voz...